Tierra
Tierra de cultivo en sacos, es una mezcla de turba negra, rubia, perlita, fibra de coco, madera, hummus y nutrientes de diversas procedencias, que ha sido desinfectada con vapor para liberárla de posibles plagas. Estas tierras, tienen un alto contenido en materia orgánica, y su calidad estriba en la relación entre unos ingredientes u otros de la mezcla.
Sustratos para cultivo de cannabis
Todas las marcas de sustratos y fertilizantes tienen diferentes tipos de tierras, cada cual se adapta a una exigencias de cultivo determinadas.
Las Ligth-mix (mezcla ligera),
son sustratos para añadir nutrientes desde el inicio, permitiendo al cultivador controlar la dosificación de fertilizantes desde el comienzo del cultivo.
Los sustratos All-Mix y análogos,
vienen con una fertilización válida para unos dos meses de cultivo, siendo perfectos para cultivadores que prefieren prescindir de los abonados iniciales, o para variedades de ciclo de cultivo corto, como las semillas de cannabis autoflorecientes.
La frecuencia de abonado en riego para las tierras, debe ser de 1-2 veces por semana, que podemos aumentar en virtud de las exigencias de las plantas, observándo el tiempo de deshidratación y secado de la turba, evitando siempre que seque en exceso, y también riegos continuados. Lo mejor es guiarse por el peso de la maceta, y regar cuando esta pierda "peso", pues es cuando las raices necesitan agua y nutrientes, así evitamos encharcamientos,y favorecemos la oxigenación radicular.